⎪Licenciada Sandra Chavarría*
Es verdad que todos vamos a envejecer, pero se comienza a envejecer cuando nos dejamos de mover. El hecho no es no envejecer, sino envejecer de la mejor manera. Puede que cada vez cueste más moverse, pero mientras se pueda, hay que moverse. Con los años se pierde movilidad, y eso es inevitable, pero es evitable quedarse inmóvil.
La tendencia a quedarnos quietos ante los dolores es común del ser humano. El dolor paraliza en todos los ámbitos de la vida. Pero algunos dolores lo único que lo alivia es el hecho de moverse. Algunas enfermedades desaparecen o se atenúan con el movimiento, cuando empezamos a hacer una actividad física. El cuerpo está preparado para moverse, no trunquemos su propósito. Movámonos mientras podamos. En Francia tuve una hermosa experiencia en una residencia para ancianos donde doy clases de gimnasia, una señora de 80 años me dijo: “Estoy contenta porque después de muchos años pude agarrar algo de mi alacena”. Si analizamos este movimiento es solo levantar los brazos, ¿Cómo no va a poder levantar los brazos? Lógica pura: si dejamos de hacer un movimiento, con el tiempo, se va olvidando. Entonces repito: movámonos mientras podamos.
Movámonos cualquiera sea nuestra edad. Movámonos sea poco o sea mucho. No importa la cantidad, sino la calidad, lo más importante es la regularidad. No le mezquinemos al cuerpo el placer de sentir el "Cuarteto de la felicidad", conformado por la endorfina, serotonina, dopamina y oxitócina, sustancias que por naturaleza son secretadas en el cuerpo cuando nos movemos.
¡Proba! ¡Vas a ver que cuando experimentes esa sensación de bienestar en el cuerpo, cuando compruebes lo bien que se siente durante y después de hacer una actividad física, vas a agradecer el haber comenzado! Insisto: sea poco o sea mucho: por algo hay que empezar.
Porque si no lo sabías: “Hace bien sentirse bien”.
¡Movámonos y ante cualquier duda consulte a su médico!
*Sandra Chavarría es Profesora y licenciada en Educacion Física (Universidad Nacional de la Matanza - Argentina), y Master en Salud Psico Social a travez del Deporte (Universidad Paris Descartes - Francia). Reside actualmente en París y posee una amplia trayectoria en trabajo con a la niñez y la familia.