Irak se está preparando para permitir que los hombres se casen con niñas de 9 años. Human Rights Watch denuncia lo que califica de “violación infantil”, mientras que Niyaz Abdullah, periodista iraquí, habla de una “ley pedófila”.
Para Amnistía Internacional y Human Rights Watch, este es otro ejemplo del preocupante deterioro de los derechos de las mujeres en un gran número de países.
Desde 1959, la ley iraquí sobre “estatus personal” ha fijado la edad mínima para que las niñas se casen a los 18 años. Excepcionalmente, un juez puede aprobar un matrimonio a la edad de 15 años.
Pero el 17 de septiembre, el Tribunal Supremo Federal de Irak aprobó, en segunda lectura, una propuesta para reformar esta ley que ahora permitiría a los ciudadanos elegir por sí mismos si quieren que sus asuntos familiares (matrimonio, divorcio, herencia) estén bajo control del Estado o de las autoridades religiosas.
Sin embargo, en el Parlamento los chiíes son mayoría y, según algunos, la edad mínima para casarse con una joven debería fijarse a partir de los 9 años.
Un deseo “repugnante”.
"La decisión de los políticos de legalizar la violación infantil -porque, seamos francos, eso es lo que significa el eufemismo 'matrimonio infantil'- es repugnante", escribe Andrew Stroehlein, director de relaciones con los medios en Europa, en nombre de Human Rights Watch.
Para maximizar sus posibilidades de aprobar su enmienda legislativa, los parlamentarios chiítas prometieron a cambio a sus homólogos suníes la liberación de los prisioneros asociados al grupo armado Estado Islámico, Niyaz Abdullah, periodista iraquí y ganadora del Premio Internacional de Libertad de Prensa en 2022.
En otras palabras, continúa, “danos sexo y liberaré a los terroristas”. Los miembros del Estado Islámico violaron [en Irak] a niñas de tan solo 9 y 10 años. Y el propio Iraq aprobará una ley que autoriza el matrimonio de niñas menores de 18 años. »
Sarah Sanbar, investigadora iraquí de Human Rights Watch, lo ve tanto como una legalización de la violación infantil como una ilustración de la mala salud democrática en Irak.
Porque esta modificación legislativa, que ha suscitado manifestaciones, ha sido condenada por muchos iraquíes, que incluso estarían en la clara mayoría que se opondría.
En cualquier caso, esto es lo que sugiere una encuesta realizada por el equipo electoral de Irak entre el 13 y el 15 de agosto. Según los resultados publicados en el sitio web Shafaq News, el 73% de los encuestados se opondría al cambio legal previsto.
Pese a ello, todo indica que pasará. "En el Parlamento no habrá suficientes opositores para impedir su promulgación".
[...]
*Fuente: La Presse. Por Louise Leduc.